Racionalizar el uso de los recursos energéticos, disminuir la dependencia energética y controlar el impacto ambiental. Esas son las premisas de la «Guía práctica de ahorro de la energía», publicada por el Instituto Energético de Galicia (Inega). Un manual que ofrece pautas para el consumo doméstico, el uso del vehículo privado y el transporte público, la gestión energética de las comunidades de propietarios o las distintas fuentes de energía renovables y convencionales.
El objetivo es que los ciudadanos gallegos y, particularmente, los escolares dispongan de información para racionalizar el uso de los recursos energéticos, potenciando las energías más limpias.
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